El Historial Biden-Harris

La Administración Biden-Harris, gracias en parte al Plan de Rescate Económico, llevó a Estados Unidos a la mayor recuperación de empleo jamás registrada y a la recuperación económica más sólida del mundo, que situó al desempleo por debajo del 4 % por 28 meses (el período más largo en más de 50 años) y creó 16.6 millones de puestos de trabajo desde que el presidente Biden asumió el cargo. El ARP también ha impulsado las mayores inversiones de la historia en la lucha contra el crimen, la prevención de la violencia y la inversión en seguridad pública. Gracias a esta financiación para ayudar a los estados, ciudades, pueblos y condados de todo el país, en 2023 se registró una de las tasas más bajas de delitos violentos en más de 50 años. La tasa de homicidios experimentó su mayor descenso de la historia.

El ARP también ha propiciado el mayor auge de pequeñas empresas de la historia, con un récord de 21 millones de solicitudes de nuevas empresas en los últimos tres años, un 55 % más que el año anterior a la pandemia. El programa de Estabilización del Cuidado Infantil del ARP fue fundamental para mantener abiertos los centros de cuidado infantil. El ARP dio lugar a la tasa de pobreza infantil más baja de la historia de los Estados Unidos, gracias en parte a la ampliación del Crédito Tributario por Hijos, y financió una campaña de vacunación histórica que llevó a la vacunación completa de 230 millones de estadounidenses, en comparación con los 3.5 millones que había cuando el presidente Biden asumió el cargo.

Empezar una nueva empresa es un acto de esperanza, y el presidente Biden ha tomado medidas significativas para proporcionar a las pequeñas empresas estadounidenses el apoyo que necesitan para prosperar. En el primer año de su Administración, el Gobierno federal proporcionó más de $450.000 millones en ayudas de emergencia a más de 6 millones de pequeñas empresas, y las ayudó así a mantener sus puertas abiertas durante la pandemia. Bajo la presidencia de Biden, el Gobierno federal otorgó un récord de $178.600 millones en oportunidades de contratación a pequeñas empresas, incluidos $76.200 millones a pequeñas empresas desfavorecidas. Las pequeñas empresas tradicionalmente desatendidas están creciendo a tasas casi históricas, con el crecimiento al ritmo más rápido en 30 años de las empresas de propiedad de personas de raza negra y el crecimiento al ritmo más rápido en más de una década de las empresas de propiedad de latinos. La Agencia Federal de Pequeños Negocios (SBA) ha duplicado el número de pequeños préstamos en dólares y préstamos a pequeñas empresas propiedad de latinos y propiedad de mujeres, y ha triplicado el número de préstamos a pequeñas empresas propiedad de personas de raza negra desde que el presidente Biden asumió el cargo. En 2023, los dólares de contratación federal para pequeñas empresas propiedad de mujeres alcanzaron la cantidad de dólares más alta jamás otorgada. La Administración Biden-Harris también está aprovechando decenas de miles de millones de dólares públicos y privados en préstamos e inversiones de capital a través de la Iniciativa Estatal de Crédito para Pequeñas Empresas (SSBCI) del Plan de Rescate Económico. A través de programas como la SSBCI, el Programa de Preparación de Capital de la Agencia de Desarrollo de Empresas Minoritarias (MBDA) y el programa de Navegadores Comunitarios de la SBA, el presidente Biden ha dado prioridad al apoyo práctico de asistencia técnica a las pequeñas empresas, ayudando a innumerables empresas a acceder a préstamos, obtener su licencia comercial, declarar sus impuestos y explorar los procesos de zonificación y permisos.

El presidente Biden y la vicepresidenta Harris creen que un día de trabajo duro merece un salario justo. Por eso, el Departamento de Trabajo emitió una norma que eleva el salario de 4 millones de trabajadores, ya que se aumentaron las personas elegibles para recibir compensación por horas extras cuando trabajan más de 40 horas semanales. El 1 de julio de 2024, las protecciones por horas extras se extendieron a 1 millón de trabajadores que ganan menos de $43.888 al año ($844 por semana), y el próximo año las protecciones se extenderán a otros 3 millones de trabajadores que ganan menos de $58.656 ($1128 por semana).

La clase media construyó los Estados Unidos y los sindicatos construyeron la clase media. El presidente Biden se enorgullece de ser el presidente que más ha estado a favor de los trabajadores y de los sindicatos de la historia de los Estados Unidos. El presidente y la vicepresidenta han respaldado a los trabajadores cuando se han organizado, han negociado colectivamente y se han declarado en huelga para conseguir salarios más altos, mejores prestaciones y lugares de trabajo más seguros. En septiembre de 2023, durante la histórica huelga de pie (Stand Up Strike) de los Trabajadores Automotrices Unidos (UAW), el presidente Biden hizo historia al convertirse en el primer presidente en estar en la línea de piquete. La huelga de UAW consiguió aumentos salariales históricos y ayudó a garantizar que trabajadores sindicalizados fabricaran los vehículos eléctricos en los Estados Unidos.

El presidente Biden promulgó la Ley Butch Lewis, la ley más importante para la seguridad de la jubilación sindical en más de 50 años. Gracias a esta ley, la Administración Biden-Harris rescató y protegió las pensiones de unos 2 millones de trabajadores, asegurándose así de que siguieran siendo solventes. Los trabajadores que ahorraron toda su carrera para sus pensiones merecen una jubilación sólida y digna, y este rescate de los planes de pensiones de empleadores múltiples protege sus inversiones ganadas con esfuerzo.

Además, el presidente Biden ha tomado medidas clave para garantizar que el dinero federal apoye los buenos empleos sindicales. Por ejemplo, el presidente emitió una orden ejecutiva para exigir acuerdos laborales de proyectos en proyectos de construcción federales valorados en $35 millones o más, y su Orden Ejecutiva de Buenos Empleos pide a los organismos que incorporen salarios elevados y normas laborales en los programas de subvenciones federales. Esto significa que los proyectos financiados por la agenda de Inversión en los Estados Unidos de la Administración avanzarán más rápido y sin demoras, brindarán a los contribuyentes un mejor acuerdo y proporcionarán a los trabajadores la seguridad que viene con los salarios y prestaciones negociados colectivamente.

Bajo la Administración Biden-Harris, la participación de las mujeres en edad productiva en la fuerza laboral es la más alta de la historia, y la brecha salarial de género se ha reducido. La participación de las mujeres en edad productiva en la fuerza laboral es la más alta que jamás haya existido. El presidente Biden también está trabajando para avanzar en la igualdad salarial de los empleados y contratistas federales y garantizar que los lugares de trabajo estén libres de discriminación. El presidente promulgó la Ley de Igualdad de las Trabajadoras Embarazadas y la Ley PUMP, protecciones bipartidistas de sentido común en el lugar de trabajo para las trabajadoras durante el embarazo y el posparto.

El presidente Biden y la vicepresidenta Harris creen que las grandes corporaciones deben pagar lo que les corresponde, y se han comprometido a revertir el enorme regalo fiscal que los republicanos promulgaron en 2017. El impuesto mínimo a las sociedades de la Ley de Reducción de la Inflación (IRA) garantiza que las corporaciones multimillonarias paguen al menos el 15 % de sus ingresos en impuestos. En respuesta a la oleada de recompras de acciones corporativas tras los recortes fiscales de Trump, la Administración Biden-Harris promulgó un recargo sobre las recompras de acciones corporativas para alentar a las empresas a invertir en crecimiento y productividad, en lugar de canalizar las ganancias con bonificación fiscal hacia accionistas ricos y extranjeros.

La Administración Biden-Harris puso fin a la infrafinanciación crónica del IRS, otorgándole a la agencia las herramientas que necesitaba para mejorar la experiencia de los contribuyentes y hacer que los ricos y las empresas evasoras de impuestos paguen los impuestos que debían. Esto incluye la reducción de los tiempos de espera de 28 minutos a 3 y el lanzamiento de un programa de presentación directa, el programa Direct File, para que los estadounidenses en los estados de todo el país puedan presentar sus impuestos fácilmente, en línea y de forma gratuita directamente ante el IRS. El IRS también ha utilizado esta financiación para recaudar $1300 millones en impuestos impagos de evasores de impuestos ricos y tomar medidas contra la evasión fiscal de alto nivel. En total, se prevé que el IRS recaudará cientos de miles de millones de dólares en ingresos adicionales durante la próxima década gracias a esta inversión.

La Administración Biden-Harris ha reducido los costos de la atención médica y de los medicamentos recetados, incluido un límite de $2000 en medicamentos recetados para adultos mayores y personas con discapacidad que entrará en vigor en 2025, un límite en el precio de la insulina de $35 al mes para adultos mayores y personas con discapacidad, y precios nuevos y más bajos para los medicamentos recetados como parte del Programa de Negociación de Precios de Medicamentos de Medicare. La Administración también está reduciendo las facturas de servicios públicos mediante la introducción de créditos fiscales de hasta $3200 y reembolsos directos a los consumidores de hasta $14 000 para mejoras en el hogar que ahorren energía, como bombas de calor, puertas, ventanas y aislamiento.

La Administración Biden-Harris ha tomado medidas exhaustivas para limitar las tarifas basura de todo tipo. Por ejemplo, el presidente Biden está cumpliendo su compromiso de prohibir las tarifas de asientos familiares en el transporte, que son costosas y frustrantes para muchas familias con niños pequeños. Eliminar las tarifas de asientos familiares puede significarle un ahorro de $200 en un itinerario de ida y vuelta a una familia con dos hijos. El presidente Biden tomó medidas al exigirle a las aerolíneas que les proporcionaran a los pasajeros reembolsos automáticos en efectivo por vuelos cancelados o retrasados y por pérdida de equipaje. Bajo la Administración Biden-Harris, la Oficina para la Protección Financiera del Consumidor (CFPB) intensificó la presión supervisora sobre los bancos para que examinaran sus políticas de tarifas excesivas por sobregiros y cheques rebotados, lo que llevó a que muchas instituciones financieras redujeran o eliminaran estas tarifas. Esto les ahorra a los consumidores $6200 millones por año. La CFPB también aprobó una norma para cerrar una laguna legal de larga data y reducir los cargos por pagos atrasados de las tarjetas de crédito de $32 a $8, y propuso una norma para reducir las tarifas por sobregiros de $35 a $3. Además, la Comisión Federal de Comercio propuso una prohibición intersectorial de las tarifas basura, incluidas las de venta de entradas para eventos, las de transacciones de automóviles y las de la industria gastronómica. El Consejo de Asesores Económicos prevé que las iniciativas de la Administración Biden-Harris para combatir las tarifas basura ahorren a los estadounidenses más de $20 000 millones anuales.

La Administración Biden-Harris también está enfrentando al poder de los monopolios para reducir los precios para las familias, aumentar los salarios de los trabajadores y promover la innovación y el crecimiento económico en la economía estadounidense. Siguiendo la Orden Ejecutiva sobre la Promoción de la Competencia en la Economía Estadounidense del presidente, la Administración ha tomado medidas para proteger la neutralidad de la red, para proteger a los agricultores de las prácticas desleales, para hacer que los audífonos sean más económicos, para reparar la competencia en el transporte marítimo y más. El presidente Biden ha designado líderes y financiado agencias para hacer cumplir enérgicamente la ley de competencia donde sea que se infrinja, incluso en las grandes tecnológicas, la venta de entradas, la vivienda, los productos farmacéuticos, los alimentos, la agricultura, la infraestructura, las aerolíneas y más. Estas medidas de ejecución y orientación han ahorrado o devuelto miles de millones de dólares a los consumidores estadounidenses y han protegido la dignidad y la libertad económica del pueblo estadounidense.

El presidente Biden cree que todos los estadounidenses merecen tener acceso a una vivienda segura, accesible y económica. Desde el primer día de su Administración, el presidente Biden ha dado prioridad a la vivienda para millones de estadounidenses que quieren comprar su primera casa, que viven con ingresos fijos o que experimentan necesidades de vivienda en evolución. El presidente ha tomado medidas sin precedentes para fortalecer la protección de los inquilinos y aumentar la equidad en el mercado de alquiler, así como medidas para asegurar que todos los hogares tengan la oportunidad de crear riqueza generacional mediante la adquisición de una vivienda.

Inmediatamente después de tomar posesión del cargo, el presidente Biden se enfrentó a una crisis de vivienda sin precedentes en la que millones de estadounidenses se enfrentaban al desalojo relacionado con los impactos económicos de la pandemia. En respuesta a ello, la Administración Biden-Harris desplegó herramientas sin precedentes para mantener a los estadounidenses alojados, incluidos casi 11 millones de pagos de asistencia de emergencia para el alquiler, y una infraestructura nacional de prevención de desalojos (la primera de su clase) que mantuvo las solicitudes de desalojo por debajo de los niveles anteriores a la pandemia durante un año y medio después de que finalizara la moratoria de desalojo.

El presidente Biden se ha centrado en la construcción de más viviendas y en la reducción de los costos de la vivienda. Actualmente, se están construyendo más viviendas que en cualquier otro momento en más de 50 años, y la tasa de construcción de nuevas viviendas ha aumentado un 17 % en comparación con la administración anterior. Los alquileres han bajado el año pasado en muchos lugares, y la tasa de propiedad de la vivienda es más alta ahora que antes de la pandemia.

El presidente Biden cree que las tasaciones de viviendas deben ser justas e imparciales para todos los estadounidenses; por eso ha liderado un esfuerzo coordinado de todo el Gobierno para erradicar la discriminación en el proceso de tasación y compra de viviendas. La “brecha de tasación”, la probabilidad de que las viviendas en comunidades de color estén infravaloradas en comparación con las viviendas en comunidades de mayoría blanca, se ha reducido en aproximadamente un 40 % desde que el presidente Biden tomó medidas sobre el sesgo de la tasación.

El presidente Biden está llevando a cabo una “Década de Infraestructura” que está desbloqueando el acceso a las oportunidades económicas, creando puestos de trabajo bien remunerados, impulsando la fabricación nacional y haciendo crecer la economía de los Estados Unidos. Gracias a la Ley Bipartidista de Infraestructura, la Administración Biden-Harris ha anunciado la financiación de 72 000 proyectos de infraestructura en miles de comunidades de los 50 estados, el D.C., tribus y territorios. Estos proyectos están reconstruyendo nuestra nación con materiales fabricados en los Estados Unidos, gracias a los requisitos de que todo el hierro, el acero, los productos manufacturados y los materiales de construcción utilizados en los proyectos de infraestructura financiados con fondos federales se produzcan en los Estados Unidos. La implementación de la Ley Bipartidista de Infraestructura ha contribuido a crear cientos de miles de puestos de trabajo bien remunerados, incluido un número récord de empleos en el sector de la construcción.

La Ley Bipartidista de Infraestructura es la mayor inversión en carreteras y puentes desde el sistema de autopistas interestatales del presidente Eisenhower, y la Administración Biden-Harris ya ha iniciado mejoras en más de 200 000 millas de carreteras y ha puesto en marcha más de 12 000 proyectos de reparación de puentes. La Ley también invierte $66 000 millones en ferrocarriles, la mayor inversión en ferrocarriles de pasajeros desde la creación de Amtrak, y realiza la mayor inversión en transporte público de la historia, incluyendo miles de millones para electrificar o mejorar nuestras flotas de autobuses, ferrocarriles de tránsito y transbordadores. La Administración Biden-Harris ha sustituido cerca de 500 000 tuberías de plomo y ha anunciado inversiones de miles de millones de dólares en agua potable, internet de alta velocidad, y más, para mejorar la vida de millones de estadounidenses.

El presidente Biden promulgó la Ley CHIPS y Ciencia para restablecer el liderazgo de los Estados Unidos en la fabricación de semiconductores, reforzar las cadenas de suministro mundiales y fortalecer la seguridad nacional y económica. Los semiconductores se inventaron en los Estados Unidos, donde llegó a producirse casi el 40 % de los chips del mundo, pero esa cifra se redujo a aproximadamente el 10 %. La Ley CHIPS y Ciencia está cambiando esto mediante la inversión de casi $50 000 millones en la fabricación, investigación y desarrollo de semiconductores y en la capacidad de mano de obra en los Estados Unidos.

Las empresas ya han comprometido casi $450 000 millones en inversiones totales en semiconductores en todo el país. Esto se debe, en gran parte, al programa de incentivos CHIPS del Departamento de Comercio, que ha firmado acuerdos preliminares con 15 empresas de 15 estados para proporcionar más de $30 000 millones en financiación directa y más de unos $25 000 millones en préstamos para trabajos de fabricación de semiconductores. Estos proyectos apoyarán la creación de más de 125 000 puestos de trabajo directos en la construcción y la fabricación, así como una mayor inversión en el desarrollo y la formación de la mano de obra. Como resultado de estas inversiones, los Estados Unidos están en vías de producir casi el 30 % del suministro mundial de chips de vanguardia para 2032, frente al 0 % cuando el presidente Biden y la vicepresidenta Harris asumieron sus cargos.

Además, la Administración Biden-Harris ha financiado 12 centros tecnológicos Tech Hubs para aprovechar los activos regionales y acelerar el crecimiento de las industrias innovadoras del futuro. El programa Tech Hubs, autorizado por la Ley CHIPS y Ciencia, reúne a empresas; gobiernos estatales, locales y tribales; instituciones de enseñanza superior; sindicatos; y organizaciones sin fines de lucro en torno a una visión común del desarrollo económico regional. Estos Tech Hubs garantizarán que los beneficios de la innovación y el desarrollo tecnológico (que durante demasiado tiempo se han concentrado en unas pocas ciudades costeras) lleguen a las comunidades rurales, industriales y desfavorecidas.

La Ley de Reducción de la Inflación del presidente Biden es un elemento clave de la agenda de Inversión en los Estados Unidos de la Administración Biden-Harris, que está reduciendo los costos, creando empleos bien remunerados y ampliando las oportunidades en todos los rincones del país. La Ley de Reducción de la Inflación ya ha transformado la vida de los estadounidenses al vencer a las grandes compañías farmacéuticas. Millones de estadounidenses están ahorrando un promedio de unos $800 al año en primas de seguro médico gracias a los ahorros del Plan de Rescate Económico y la Ley de Reducción de la Inflación ampliada, lo que ha contribuido a llevar la tasa de personas sin seguro médico del país a mínimos históricos. Gracias a la Ley de Reducción de la Inflación, los adultos inscritos en Medicaid, así como los beneficiarios de Medicare, ahora pueden recibir gratis las vacunas recomendadas. Eso significa que más estadounidenses cubiertos por Medicare ahorran un promedio de $70 en gastos de bolsillo en vacunas, como la vacuna contra el herpes zóster y la vacuna contra la difteria, el tétanos y la tos ferina (TDAP). En 2023, 10,3 millones de afiliados recibieron una vacuna gratuita. Debido a que Medicare puede ahora negociar precios más bajos de medicamentos recetados para adultos mayores y personas con discapacidades, se espera que los contribuyentes estadounidenses ahorren $6000 millones en costos de medicamentos recetados, y se espera que las personas inscritas en Medicare ahorren $1500 millones en costos de bolsillo solo en 2026. Los 3,4 millones de personas inscritas en Medicare Parte D que surtieron una receta de insulina en 2023 tuvieron sus costos de insulina limitados a $35 por mes, lo que les ahorró a algunos adultos mayores cientos de dólares por el suministro de un mes.

Las personas con Medicare continuarán viendo cómo sus costos de medicamentos recetados disminuyen a medida que más disposiciones de la Ley de Reducción de la Inflación entren en vigor en 2025. Se prevé que cerca de 19 millones de adultos mayores y otros beneficiarios de la Parte D ahorren $400 al año en medicamentos recetados cuando el límite de costos de bolsillo se reduzca a $2000 en 2025. En 2024, el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) anunció que había llegado a acuerdos con todos los fabricantes participantes sobre los 10 primeros medicamentos seleccionados para el Programa de Negociación de Precios de Medicamentos de Medicare, y se redujo el precio de lista de estos medicamentos entre un 38 % y un 79 %.

La Administración Biden-Harris lucha contra la crisis climática promoviendo las energías limpias; reduciendo la contaminación de los edificios, el transporte y la industria; apoyando la agricultura y la silvicultura climáticamente inteligentes; y garantizando que el futuro de las energías limpias se fabrique aquí, en los Estados Unidos. La Ley de Reducción de la Inflación también ha acelerado el progreso hacia la meta del presidente Biden y la vicepresidenta Harris de reducir la contaminación climática de los Estados Unidos entre un 50% por debajo de los niveles de 2005 para 2030. En los dos años transcurridos desde que el presidente Biden promulgó la Ley de Reducción de la Inflación, las empresas han anunciado más de 330 000 puestos de trabajo en energías limpias y $300 000 millones en nuevas inversiones en energías limpias en casi todos los estados del país. Juntas, la Ley CHIPS, la Ley Bipartidista de Infraestructura y la Ley de Reducción de la Inflación han ayudado a catalizar más de $900 000 millones en inversiones anunciadas del sector privado en energías limpias y fabricación. En 2023, más de 3,4 millones de familias estadounidenses ahorraron $8400 millones de créditos fiscales al consumidor de la IRA en tecnologías de energía para el hogar. Estos créditos fiscales pueden ahorrar a las familias hasta un 30 % en bombas de calor, aislamiento, energía solar en los tejados y otras tecnologías de energía limpia. La Ley de Reducción de la Inflación paga por completo estas inversiones y reduce el déficit con el paso del tiempo, recortando el gasto excesivo en intereses especiales y haciendo que las grandes corporaciones y los ricos paguen más de la parte que les corresponde.

Durante décadas, los Estados Unidos importaron productos y exportaron puestos de trabajo. Pero gracias a las políticas “Hecho en los Estados Unidos” del presidente Biden, las fábricas están funcionando y la fabricación está en auge. Hace casi un siglo, el Congreso aprobó la Ley “Compre Estadounidense” para garantizar que el dinero de los impuestos estadounidenses apoye los empleos y las empresas estadounidenses. En su primera semana en el cargo, el presidente Biden firmó una orden ejecutiva que puso en marcha una iniciativa de todo el Gobierno para hacer cumplir la ley, asegurándose de que ese compromiso ya no sonara vacío. El presidente Biden firmó la Orden Ejecutiva “Invéntelo aquí, fabríquelo aquí”, que ordenaba a los organismos federales dar prioridad a la fabricación nacional en lo que se refiere a investigación, desarrollo, innovación y comercialización de inventos. El presidente y la vicepresidenta lucharon por disposiciones “Hecho en los Estados Unidos” en toda su agenda de Inversión en Estados Unidos que van aún más allá para promover la fabricación nacional, y ganaron. También implementaron el cambio más radical de la Ley “Compre Estadounidense” en casi 70 años para reforzar estos requisitos. Desde entonces, los Estados Unidos han creado 1,6 millones de nuevos empleos en fabricación y construcción y han visto cientos de miles de millones en inversiones del sector privado en los sectores.

El Plan de Rescate Económico (ARP) del presidente Biden proporcionó unos históricos $39 000 millones para ayudar a mantener abiertos más de 225 000 proveedores de cuidado infantil, incorporar a cientos de miles de mujeres con niños pequeños a la población activa, reducir los costos del cuidado infantil por niño en $1250 y aumentar los salarios de los trabajadores del cuidado infantil en un 10 %. El ARP también aportó $37 000 millones en los 50 estados para mejorar, ampliar y fortalecer los servicios a domicilio y comunitarios, y $145 millones para ayudar al Programa Nacional de Apoyo a los Cuidadores Familiares a ofrecer asesoramiento, capacitación y ayuda a corto plazo a los cuidadores familiares y a otros cuidadores informales. El presidente Biden y la vicepresidenta Harris también han propuesto importantes inversiones para aumentar el salario de los trabajadores de cuidado infantil y limitar los costos del cuidado infantil para que la mayoría de las familias no paguen más de $10 por día por el cuidado infantil, así como un programa nacional integral de licencias médicas y familiares remuneradas.

Para poner en práctica la Orden Ejecutiva sobre el Aumento del Acceso al Cuidado de Alta Calidad y el Apoyo a los Cuidadores del presidente Biden, la Administración Biden-Harris ha tomado medidas para reducir los costos del cuidado infantil para las familias de militares; ha aumentado el salario de los maestros de Head Start; ha reducido el costo del cuidado infantil para más de 100 000 familias trabajadoras con bajos ingresos; se ha asegurado de que más de 140 000 proveedores de cuidado infantil reciban un pago más justo y puntual; ha establecido normas de dotación mínima de personal para las residencias de ancianos; y ha tomado medidas para garantizar que los trabajadores de cuidado a domicilio reciban una mayor parte de los pagos de Medicaid.

Las alianzas y asociaciones de los Estados Unidos son las más sólidas de su historia reciente, y eso se debe a la labor del presidente Biden para revitalizar nuestras relaciones con países de todo el mundo a fin de promover nuestros intereses y valores, así como para restaurar el liderazgo de los Estados Unidos en la escena mundial. El presidente Biden ha organizado cumbres de líderes de alto nivel con socios de África, América y Asia. Ha fortalecido y expandido la OTAN, la mayor alianza militar de la historia del mundo. Ayudó a que el G7 volviera a ser la principal plataforma para coordinar la respuesta internacional a los mayores desafíos a los que nos hemos enfrentado desde que asumió el cargo, desde una pandemia internacional hasta la seguridad energética, y reunió a los socios del G7 para imponer un rápido costo económico a Rusia por su brutal guerra contra Ucrania.

En el Indo-Pacífico, la diplomacia del presidente Biden ha hecho que los Estados Unidos estén más seguros a la hora de afrontar los retos que plantea una República Popular China (RPC) cada vez más asertiva. El presidente Biden transformó nuestro enfoque hacia la región, revirtiendo el giro interno de los Estados Unidos que China estaba aprovechando. La Administración Biden-Harris ha profundizado nuestras alianzas económicas y de seguridad, poniendo en marcha nuevas alianzas de seguridad como AUKUS con Australia y el Reino Unido; ha impulsado una cooperación económica y de defensa sin precedentes entre los Estados Unidos, Corea del Sur y Japón; y ha forjado nuevas asociaciones con aliados de los Estados Unidos en tratados como Japón y Filipinas. La Administración Biden-Harris creó el Marco Económico Indo-Pacífico para la Prosperidad con otros 13 socios a fin de garantizar que los Estados Unidos afronten los retos económicos de hoy y no los de hace dos décadas, como la creación de cadenas de suministro seguras y la protección de nuestras tecnologías críticas, y ha reunido a socios del Atlántico y del Pacífico para definir las reglas del juego y reforzar nuestra ventaja en la competencia con China en esta década decisiva.

La Administración Biden-Harris también ha creado importantes alianzas históricas, como la Alianza para la Prosperidad Económica en las Américas, a fin de impulsar la recuperación y el crecimiento del hemisferio occidental para beneficiar a los trabajadores. En el marco de la Declaración sobre Migración y Protección de Los Ángeles, la Administración ha coordinado medidas para abordar las causas fundamentales de la migración, ampliar las vías legales y fortalecer la aplicación humanitaria de la ley contra la migración irregular, lo que ha contribuido a una reducción de aproximadamente el 58 % de la migración irregular procedente de los países del norte de América Central desde el inicio de la Estrategia de Causas Fundamentales de la Administración Biden-Harris en julio de 2021.

El presidente Biden también ha elevado la asociación de los Estados Unidos con África, dando la bienvenida a la Unión Africana como miembro permanente del G20 y seleccionando a África como el primer y principal corredor económico en el marco de su iniciativa insignia de la Asociación para la Infraestructura e Inversión Mundiales (PGI) para abordar la brecha de infraestructura global.

En todo el mundo, desde África hasta el hemisferio occidental, pasando por Oriente Medio y el Indo-Pacífico, el presidente Biden está forjando una coalición de naciones lo más fuerte posible para superar los desafíos compartidos y posicionar a los Estados Unidos para configurar el futuro del orden internacional.

Gracias al liderazgo del presidente Biden, la OTAN está más fuerte, más grande, más unida y tan decidida como en cualquier otro momento de la historia, y eso hace que todos estemos más seguros y protegidos. El presidente Biden ha revitalizado y revigorizado a la OTAN, la mayor alianza militar de la historia del mundo. Ayudó a darles la bienvenida a dos nuevos miembros de la Alianza, Suecia y Finlandia, y obtuvo rápidamente un fuerte apoyo del Congreso para su adhesión, y ha animado con éxito a los Aliados a aumentar significativamente su gasto en defensa (prácticamente triplicó el número de Aliados que cumplen sus compromisos de gasto en defensa del 2 %).

En respuesta a la invasión rusa de Ucrania, el presidente Biden animó a los Aliados de la OTAN a unirse a la coalición de más de 50 naciones que están proporcionando a Ucrania la ayuda que necesita para prevalecer, y el presidente Biden fue el anfitrión de la histórica Cumbre del 75 aniversario de la OTAN en 2024 en Washington, que demostró la fuerza y la unidad de la Alianza Transatlántica.

El presidente Biden ha trabajado sin descanso para crear una coalición de más de 50 países que apoyan a la gente de Ucrania, proporcionando una ayuda que ha sido fundamental para ayudarlos a defender su libertad e independencia y a protegerse de los brutales ataques de Rusia. Ha trabajado con aliados y socios para imponer costos sin precedentes a Rusia, con el fin de cortar la financiación de su maquinaria bélica y hacer que se responsabilice de su agresión contra Ucrania. Ha conseguido un fuerte apoyo bipartidista en su país para suministrar armas y equipos cruciales a Ucrania, así como ayuda económica y humanitaria. El presidente Biden ha sido claro: estaremos con Ucrania hasta que prevalezca.

El presidente Biden ha dejado claro que su apoyo a la seguridad de Israel es férreo. Inmediatamente después de que Hamás lanzara su atroz ataque el 7 de octubre, el presidente Biden se ha mantenido firme junto a Israel. Como el presidente Biden ha dicho muchas veces, Israel tiene el derecho y el deber de defenderse de las amenazas a las que se enfrenta, incluidos grupos terroristas como Hamás. Al mismo tiempo, el presidente Biden ha dejado claro que en este conflicto han muerto demasiados civiles palestinos. La forma en que Israel se defiende importa, y el presidente Biden ha dejado claro que deben tomar todas las medidas posibles para evitar víctimas civiles.

El presidente Biden trabajó día y noche para lograr un acuerdo de liberación de los rehenes retenidos por los terroristas de Hamás, entre los que se encuentran estadounidenses, dar lugar a un cese del fuego inmediato, crear las condiciones para que llegue a Gaza una mayor cantidad de ayuda humanitaria y poner fin al conflicto actual.

Desde el comienzo del conflicto en Gaza, el presidente Biden también ha liderado los esfuerzos internacionales para hacer llegar ayuda humanitaria a Gaza con el fin de aliviar el sufrimiento de los civiles palestinos. Los Estados Unidos son el mayor proveedor de ayuda humanitaria a la respuesta en Gaza. Los Estados Unidos también siguen trabajando para crear las condiciones necesarias para una paz duradera en la región, incluso mediante el apoyo a una solución de dos Estados, que es más importante que nunca, de manera que, una vez terminado este conflicto, los israelíes y los palestinos puedan convivir en paz duradera.

El presidente Biden ha trabajado para mantener a los estadounidenses seguros y protegidos. Bajo la dirección del presidente Biden, los Estados Unidos sacaron del campo de batalla a los principales líderes de ISIS y de Al Qaeda, con lo que demostraron nuestra determinación y capacidad para defender al pueblo estadounidense de quienes buscan hacernos daño y por vías que no requieren arriesgar la vida de miles de estadounidenses en combate. Estas exitosas misiones han enviado un poderoso mensaje a todos los terroristas que amenazan a los Estados Unidos y a nuestros intereses en todo el mundo: los Estados Unidos están comprometidos a ser implacables en estos esfuerzos.

El presidente Biden ha traído a casa a más de 70 estadounidenses que fueron tomados como rehenes o detenidos injustamente en lugares de todo el mundo, como Afganistán, Birmania, Gaza, Haití, Irán, Rusia, Ruanda y Venezuela. Él y su equipo han trabajado día y noche utilizando una intensa diplomacia a fin de negociar la liberación de estadounidenses tomados como rehenes o detenidos injustamente en el extranjero para que puedan reunirse con sus familias. Bajo la dirección del presidente Biden, el Gobierno de los Estados Unidos también ha comenzado a emitir alertas de viaje que advierten a los estadounidenses de que no viajen a determinados países ante el riesgo de ser detenidos injustamente, y emitió una nueva orden ejecutiva que permite al Gobierno de los Estados Unidos tomar medidas, incluida la imposición de sanciones, para responsabilizar a quienes tomen a estadounidenses como rehenes. El presidente Biden ha dejado claro que no dejará de trabajar hasta que todos los estadounidenses detenidos injustamente o tomados como rehenes en todo el mundo se reúnan con sus familias.

Los Estados Unidos anunciaron su primera Estrategia Nacional de Lucha contra el Terrorismo Interno y su primera Estrategia de Lucha contra la Corrupción.

Para combatir el flagelo del fentanilo y otras drogas sintéticas y desbaratar el suministro de opiáceos ilícitos, la Administración Biden-Harris ha coordinado esfuerzos internacionales a través del Comité Trilateral de Fentanilo con Canadá y México, la Coalición Mundial para Abordar las Amenazas de las Drogas Sintéticas con más de 150 países, y la cooperación antinarcóticos con la RPC.

El presidente Biden ha reforzado la respuesta federal ante las catástrofes al darle instrucciones a su Administración para que mejore la preparación ante los desastres. La Administración ha conseguido miles de millones de dólares en financiación para ayudar a las comunidades estadounidenses a volverse más resilientes ante el cambio climático y mitigar los efectos de las catástrofes, ya sean naturales o provocadas por el hombre. Ha ordenado a los organismos federales de respuesta que, siempre que sea posible, reserven los activos federales necesarios para asegurar actividades de subsistencia para las comunidades cuando se produzcan catástrofes, ya sean sistemas aéreos de extinción de incendios o equipos especializados de rescate en aguas rápidas. Ha aprobado rápidamente declaraciones de catástrofe grave para garantizar la asistencia federal a los sobrevivientes que necesitan ayuda para reparar sus hogares y reponer los objetos personales perdidos, y ha agilizado la asistencia federal a las comunidades para la reconstrucción después de las catástrofes.

Bajo la Administración Biden-Harris, hemos reforzado nuestras alianzas económicas y en materia de seguridad, y hemos reunido a socios del Atlántico y del Pacífico para definir las reglas del juego y afianzar nuestra ventaja en la competencia con China. Esto incluye la creación de una nueva alianza mundial con Japón, el fortalecimiento de la disuasión ampliada con la República de Corea, la profundización de nuestras alianzas con Australia y el lanzamiento de una cooperación histórica con Filipinas. El presidente Biden también ha logrado avances concretos con China para detener el flujo de precursores de fentanilo a este país.

El objetivo de la Administración Biden-Harris en cada compromiso con China es defender el interés del pueblo estadounidense. El enfoque estratégico y específico del presidente Biden para tratar con China, junto con las medidas históricas que esta Administración ha tomado para fortalecer nuestra economía, ha aumentado nuestra capacidad para competir, a la vez que evitamos que la competencia se desvíe hacia el conflicto o la confrontación.

Con previsión, diplomacia y el poder de alianzas y asociaciones revitalizadas, la Administración Biden-Harris ha colocado a los Estados Unidos en la mejor posición posible para ganar nuestra competencia estratégica con China. La clave es la gestión responsable a través de la diplomacia.

En 2022, el presidente Biden firmó la histórica ley bipartidista Ley del Sargento de Primera Clase Heath Robinson que Honra Nuestra Promesa de Abordar los Tóxicos Integrales (PACT), que promulgó la ampliación más significativa de prestaciones y servicios para veteranos expuestos a tóxicos y para sus sobrevivientes en más de treinta años. Nombrada en honor del Sargento de Primera Clase Heath Robinson, un médico de combate condecorado que murió de una forma rara de cáncer de pulmón, esta legislación histórica brinda prestaciones y servicios oportunos a los veteranos (de todas las generaciones) que han sido afectados por exposiciones tóxicas mientras servían a nuestro país.

Con demasiada frecuencia, el servicio militar puede aumentar los riesgos para la salud de nuestros veteranos, y algunas lesiones y enfermedades como el asma, el cáncer y otras pueden tardar años en manifestarse. Estas realidades pueden dificultar que los veteranos y sus sobrevivientes establezcan una conexión directa entre su servicio y las discapacidades resultantes de exposiciones ambientales militares como los pozos de quema, un paso necesario para garantizar que reciban las prestaciones que se han ganado. La Ley PACT elimina estas barreras y garantiza que los veteranos reciban el cuidado y los servicios que se merecen. Para los sobrevivientes de veteranos que fallecieron a causa de una enfermedad relacionada con sustancias tóxicas, la Ley PACT proporciona una vía de acceso a prestaciones que incluyen estipendios mensuales y acceso a préstamos hipotecarios, así como beneficios educativos. Los cónyuges de veteranos sobrevivientes con hijos pueden calificar para más de $2000 al mes y financiación para la matrícula universitaria.

El Departamento de Asuntos de los Veteranos (VA) ha concedido nuevas prestaciones por discapacidad relacionadas con la Ley PACT a más de 1,2 millón de veteranos y a más de 13 000 sobrevivientes de veteranos que fallecieron por enfermedades relacionadas con sustancias tóxicas. Gracias en parte a la Ley PACT, el VA está brindando prestaciones a los veteranos y sus sobrevivientes al ritmo más rápido de la historia, procesando más de 2,2 millones de reclamos totales (tanto de la Ley PACT como de las que no son PACT combinadas). Más de 6 millones de veteranos han sido examinados para detectar exposición a sustancias tóxicas. Bajo el liderazgo del presidente Biden, la Administración también redujo el número de veteranos sin hogar, ya que amplió el acceso a viviendas de apoyo permanente, apoyo jurídico y capacitación laboral para los veteranos y sus familias. En 2021, la Administración publicó una estrategia integral de salud pública para reducir el suicidio de veteranos y, desde entonces, ha ampliado el acceso a los servicios de salud mental para veteranos, eliminando barreras de costo, contratando a más especialistas en apoyo de pares y financiando más programas comunitarios. Por último, la Administración tomó medidas ejecutivas para brindar un mejor apoyo a los cónyuges, cuidadores y sobrevivientes de militares y veteranos mediante la ampliación de programas fundamentales, entre otros, aquellos que toman medidas enérgicas contra los actores depredadores que estafan a nuestros veteranos y familias de militares, así como los que abordan la inseguridad alimentaria, el acceso a cuidado infantil de calidad, la seguridad laboral para los cónyuges y el apoyo a la salud mental.

Como miembros de una familia militar, el presidente y la primera dama reconocen que el compromiso y la resiliencia de las familias vinculadas a la milicia son esenciales para el reclutamiento, la retención y la preparación de nuestras Fuerzas Armadas. A través de la iniciativa de la Casa Blanca “Joining Forces”, dirigida por la Dra. Biden, la Administración Biden-Harris ha trabajado para apoyar a las familias de militares y veteranos, cuidadores y sobrevivientes. Esto incluye una orden ejecutiva que facilita a los cónyuges de militares obtener y mantener empleos en el Gobierno federal: el conjunto más completo de medidas administrativas que cualquier presidente haya tomado para apoyar a los cónyuges de militares, con casi 20 nuevas medidas destinadas a aumentar la estabilidad profesional, ampliar los recursos de empleo y mejorar el apoyo a la asistencia para la transición de los cónyuges de militares.

Asimismo, la Administración Biden-Harris garantiza que los educadores tengan los recursos y las herramientas que necesitan para apoyar en el aula a los niños vinculados a las Fuerzas Armadas, y el Departamento de Defensa (DoD) está implantando la educación preescolar universal en las escuelas de la Actividad Educativa del Departamento de Defensa (DoDEA), centrándose en el acceso a la educación en la primera infancia. La Administración Biden-Harris también apoya a los cuidadores de militares, proporcionándoles recursos y haciendo que el cuidado infantil y los cuidados de largo plazo sean más accesibles y económicos.

El cáncer es algo personal para el presidente, la vicepresidenta y la primera dama, como lo es para prácticamente todas las familias estadounidenses. La Misión contra el Cáncer de Biden ha logrado avances para los estadounidenses. La Administración Biden-Harris está movilizando al Gobierno federal, las empresas privadas, los proveedores de atención médica, las instituciones de investigación y los grupos de defensa y de pacientes para acelerar los avances en materia de prevención, detección temprana, innovación y apoyo a los pacientes y sus familias. El presidente y la primera dama adoptaron medidas para llevar las pruebas de detección del cáncer a más comunidades y recuperaron los niveles de detección previos a la pandemia, después de que los estadounidenses perdieran cerca de 10 millones de pruebas de detección del cáncer durante la pandemia. Esto incluyó un compromiso de más de $1000 millones de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, una importante acción del sector privado y medidas del Departamento de Asuntos de los Veteranos para llegar al menos a 1 millón de veteranos con pruebas de detección del cáncer.

Con el liderazgo del presidente y la primera dama, la Administración Biden-Harris ofreció los primeros servicios de navegación reembolsables para familias que se enfrentan al cáncer. Esto significa que los adultos mayores con un diagnóstico de cáncer podrán contar con un navegador de pacientes, alguien que los ayude a estar mejor informados, a tomar decisiones sobre el tratamiento y a acceder a recursos a lo largo de su recorrido oncológico. Adicionalmente, al asegurar el compromiso de las principales compañías de seguros a reembolsar los servicios de navegación, más de 150 millones de estadounidenses que utilizan seguros privados tendrán acceso de pago a estos servicios que mejoran los resultados y la equidad. El presidente Biden y la vicepresidenta Harris también aseguraron una inversión bipartidista de $5000 millones para promover nuevos avances en la prevención, detección y tratamiento del cáncer y otras enfermedades potencialmente mortales, y crearon una nueva agencia de investigación, la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada para la Salud (ARPA-H). La ARPA-H ya ha comprometido más de $400 millones en programas de vanguardia destinados a acabar con el cáncer tal y como lo conocemos. La Administración Biden-Harris también dio prioridad a la innovación que salva las vidas de los miembros del servicio militar de nuestra nación y los veteranos que se enfrentan al cáncer a través de nuevas inversiones y programas de investigación de VA y el DoD; adoptó medidas a través de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) y los Institutos Nacionales de Salud para garantizar que los ensayos clínicos lleguen a más comunidades; y apoyó a la próxima generación de científicos e innovadores del cáncer de clase mundial a través del programa de Investigadores para la Misión contra el Cáncer del Instituto Nacional del Cáncer. A través de la Ley Bipartidista de Infraestructura, la Agencia de Protección Ambiental dedicó más de $1000 millones a proyectos de limpieza en 50 sitios tóxicos del Superfondo en todo el país y protegió a más de 100 millones de estadounidenses de las sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas (PFAS) (los “químicos permanentes” conocidos por causar cáncer y otros problemas de salud) estableciendo la primera norma de agua potable de la historia para las PFAS y dedicando más de $20 000 millones a mejorar el agua potable de los estadounidenses.

Cuando el presidente Biden y la vicepresidenta Harris asumieron el cargo, el número de muertes por sobredosis de drogas estaba aumentando en más de un 30 % respecto al año anterior. Gracias al aumento de la financiación y los recursos, las muertes por sobredosis disminuyeron un 10 % respecto al año anterior en los 12 meses que terminaron en abril de 2024. Se trata de la mayor disminución de muertes por sobredosis registrada. La Administración Biden-Harris ha tomado medidas cruciales para hacer esto posible, como la incautación en los últimos dos años de más fentanilo en nuestra frontera que en los últimos cinco años combinados; la detención y el procesamiento de decenas de narcotraficantes de alto nivel y líderes de cárteles; la sanción de más de 300 entidades e individuos implicados en el comercio mundial de drogas ilícitas; y el establecimiento de una cooperación antinarcóticos histórica con China. La Administración Biden-Harris también invirtió recursos históricos en prevención y tratamiento, ampliando el acceso al tratamiento del trastorno por consumo de opioides a millones de estadounidenses más.

Adicionalmente, la Administración Biden-Harris adoptó medidas sin precedentes para ampliar el acceso a la naloxona y otras intervenciones de reducción de daños, como permitir el uso de fondos para que los departamentos locales de salud pública adquieran naloxona; publicar directrices para facilitar a los programas la obtención y distribución de naloxona a las poblaciones de riesgo; y dar prioridad a la revisión de las solicitudes de naloxona sin receta médica. La Administración también ha cambiado de manera sustancial el tratamiento de las adicciones en todo el país, colaborando con el Congreso para eliminar las barreras que impedían a los profesionales médicos recetar tratamientos para el trastorno por consumo de opioides y llevando a cabo una normativa para hacer permanentes las flexibilidades de la era del COVID-19, que permitían recetar buprenorfina por telesalud y dosis de metadona para tomar en casa.

En octubre de 2023, el presidente emitió una amplia Orden Ejecutiva sobre Inteligencia Artificial Segura y Confiable. La Orden Ejecutiva, que es la medida más completa sobre seguridad de la IA adoptada por cualquier gobierno en el mundo, adopta un enfoque integral para promover el liderazgo global de los Estados Unidos en IA, fomentar la innovación responsable y promover la competencia. A partir de ahora, los creadores de potentes sistemas de IA deberán comunicar al Gobierno los resultados de sus pruebas de seguridad. La Orden Ejecutiva también garantiza que, a medida que las nuevas tecnologías evolucionan rápidamente, el Gobierno siga protegiendo la privacidad de los estadounidenses, fomentando la equidad y los derechos civiles, y defendiendo a los consumidores, los pacientes, los estudiantes y los trabajadores.

La Orden Ejecutiva ya ha dado lugar a la adopción de medidas en todo el Gobierno federal, incluido un aumento del talento de la IA a nivel de Gobierno que atrajo cientos de profesionales de la IA al Gobierno; la publicación de directrices de la IA a nivel de Gobierno que faculten a los organismos federales a aprovechar la IA para mejorar los servicios gubernamentales; y el establecimiento de un plan estratégico nacional de investigación y desarrollo (I+D) en el que se esbozan las prioridades y las metas fundamentales de las inversiones federales en I+D de IA.

Además, gracias al liderazgo de la Administración Biden-Harris, 16 empresas han asumido compromisos voluntarios sobre el uso seguro y responsable de la IA. Estos compromisos incluyen pruebas de seguridad internas y externas antes de lanzar sistemas de IA; compartir información con el público sobre riesgos de seguridad y capacidades peligrosas; y desplegar la IA para ayudar a abordar los mayores desafíos de la sociedad, como la mitigación del cambio climático. El nuevo Instituto de Seguridad de la IA lidera los esfuerzos del Gobierno en materia de seguridad y confianza en la IA. La Comisión Federal de Comunicaciones también ha tomado medidas críticas para hacer que las llamadas robotizadas generadas por IA sean ilegales.

La administración Biden-Harris también impuso controles de exportación para evitar que los chips de IA de mejor desempeño cayeran en manos de quienes pudieran usarlos en contra de los Estados Unidos. Por último, el presidente Biden promulgó un decreto ejecutivo para garantizar que la infraestructura necesaria para las operaciones avanzadas de IA, incluidos centros de datos de gran escala e infraestructura de energía, se construya con rapidez y a escala en los Estados Unidos.

El presidente Biden firmó la Ley Bipartidista de Comunidades más Seguras (BSCA), la mayor inversión en salud mental juvenil jamás realizada, destinando $1000 millones de esa financiación a escuelas de todo el país para contratar y capacitar a nuevos asesores en salud mental. La Administración Biden-Harris lanzó 988, la Línea Nacional de Prevención del Suicidio y Crisis, a la que cualquiera puede llamar, enviar mensajes de texto o chatear para conectarse con un asesor de crisis capacitado; desarrolló nuevos recursos con el fin de apoyar la salud mental y la resiliencia de los trabajadores de primera línea; amplió la cobertura de Medicare para incluir servicios adicionales de trastorno por consumo de sustancias y ampliar los servicios de salud mental; facilitó que las escuelas aprovecharan Medicaid para ofrecer atención de salud mental a millones de niños y jóvenes; invirtió en programas de salud mental que ayudan a los miembros de las Fuerzas Armadas y a los veteranos, así como a sus familias, cuidadores y sobrevivientes; y aprobó una norma que garantiza que la cobertura de salud mental de más de 175 millones de estadounidenses esté al mismo nivel que su cobertura de salud física.

Desde su primer día en el cargo, el presidente Biden ha tomado medidas decisivas para restaurar y fortalecer la democracia estadounidense. Inmediatamente restauró la independencia del Departamento de Justicia para respetar el Estado de derecho y exigió a los miembros de su Administración que firmaran el compromiso ético más firme de la historia para limitar el poder de los intereses especiales. Promulgó la Ley de Reforma del Conteo Electoral y Mejora de la Transición Presidencial, que establece directrices claras para la certificación de los votos electorales con el fin de preservar la voluntad del pueblo y proteger contra el tipo de intentos de anular nuestras elecciones que condujeron a la insurrección del 6 de enero. La financiación anual para las oficinas federales de derechos civiles ha aumentado un 23% desde que el presidente Biden asumió el cargo. Desde entonces, el Departamento de Justicia ha duplicado el número de abogados especializados en el derecho al voto y el personal de control.

El presidente Biden dio a conocer un plan audaz para reformar la Corte Suprema, que incluye límites de mandato para los jueces de la Corte Suprema, un código de ética vinculante para los jueces y una enmienda constitucional que aclara que ningún presidente está por encima de la ley. El presidente Biden sigue pidiéndole al Congreso que apruebe la Ley para Promover el Derecho al Voto de John Lewis y la Ley de Libertad para Votar para proteger el sagrado derecho a votar en elecciones libres y justas, luchar contra la corrupción y garantizar que el Gobierno trabaje para el pueblo. En respuesta a la obstrucción y negativa de los republicanos del Congreso a debatir los proyectos de ley, el presidente Biden pidió reformar el obstruccionismo para proteger nuestra democracia. Mientras continúa luchando por esta legislación, el presidente Biden ha utilizado las herramientas a su disposición para fortalecer nuestra democracia, incluida la emisión de una orden ejecutiva para ampliar el acceso al voto.

El presidente Biden se postuló para el cargo para restaurar el alma de nuestra nación, y ha dejado claro que el odio, la intolerancia y la violencia no tienen cabida en los Estados Unidos. La Administración Biden-Harris ha adoptado numerosas medidas para contrarrestar el odio en todas sus formas. En mayo de 2021, el presidente Biden promulgó la Ley de Delitos de Odio por COVID-19, que incluye la Ley NO AL ODIO de Khalid Jabara y Heather Heyer, para garantizar que la información sobre delitos de odio sea más accesible a las comunidades asiático-estadounidenses y de las islas del Pacífico. Desde entonces, el fiscal general Merrick Garland ha nombrado al primer coordinador de Recursos contra los Delitos de Odio del Departamento de Justicia y ha designado personal para supervisar la revisión acelerada de los delitos de odio, y la Oficina Federal de Investigación (FBI) ha elevado los delitos de odio y las violaciones de los derechos civiles penales a su más alto nivel de prioridad de amenaza nacional, lo que ha aumentado los recursos para la prevención y la investigación de los delitos de odio y ha convertido los delitos de odio en un foco de atención para las 56 oficinas de campo de la Oficina.

En septiembre de 2022, el presidente Biden y la vicepresidenta Harris convocaron la cumbre Unidos Estamos de Pie (United We Stand) en la Casa Blanca para reunir a comunidades de todo el país con el fin de contrarrestar la violencia impulsada por el odio y presentar una visión y una agenda compartidas para trabajar por unos Estados Unidos más unidos. En la cumbre, la Administración anunció la Iniciativa de la Casa Blanca contra la Violencia Motivada por el Odio para confrontar a la violencia y los prejuicios contra todas las comunidades. Esta iniciativa ha fortalecido y continuará fortaleciendo las acciones gubernamentales para contrarrestar la violencia contra personas y comunidades negras, árabes, latinas, asiático-estadounidenses, nativas de Hawái, de las Islas del Pacífico, discapacitadas, judías, cristianas, musulmanas, hindúes y LGBTQI+. En diciembre de 2022, el presidente Biden creó un grupo interinstitucional para aumentar y coordinar mejor los esfuerzos del Gobierno de los Estados Unidos para luchar contra el antisemitismo, la islamofobia y otras formas relacionadas de prejuicio y discriminación dentro de los Estados Unidos. En 2023, el presidente publicó la primera Estrategia Nacional de los Estados Unidos contra el Antisemitismo, que la Administración sigue aplicando. La Administración también está desarrollando la primera Estrategia Nacional de los Estados Unidos contra la Islamofobia y formas relacionadas de prejuicio y discriminación, incluido el odio contra musulmanes, árabes y sijs en los Estados Unidos.

Desde el primer día, la Administración Biden-Harris se ha comprometido con una agenda gubernamental integral ambiciosa para promover la igualdad racial y apoyar a las comunidades desfavorecidas. La Administración ha adoptado medidas audaces para garantizar la participación plena y equitativa de todas las comunidades en la vida estadounidense y ha logrado resultados sin precedentes en virtud de dos órdenes ejecutivas y una cartera de medidas federales para corregir los obstáculos sistémicos, reducir las cargas y cerrar brechas injustas. La Administración ha logrado la brecha de riqueza racial más pequeña en 20 años. Otras medidas son aumentar el acceso a los dólares de contratación federal, al capital y a los programas de préstamos para las pequeñas empresas desfavorecidas; reducir la discriminación en el mercado inmobiliario; proteger a las comunidades sobrecargadas de daños ambientales y contaminación tóxica; abordar la desinversión histórica y el abandono de la infraestructura; abordar la pobreza persistente y generar prosperidad económica en las comunidades rurales; abordar las disparidades en materia de salud y atención médica; erradicar las desigualdades educativas y preservar las vías hacia la igualdad de oportunidades; enaltecer y proteger nuestra historia nacional común; promover la equidad, la seguridad y la rendición de cuentas en el sistema judicial; combatir los prejuicios, la discriminación y la violencia motivada por el odio; y reforzar la aplicación proactiva de la ley para proteger los derechos civiles de todos los estadounidenses.

Para reafirmar su compromiso con la justicia racial, el presidente Biden firmó con orgullo la Ley del Día de la Independencia Nacional Juneteenth, el primer nuevo día festivo federal establecido desde el Día del Dr. Martin Luther King Jr. cuatro décadas antes, para honrar y preservar la importancia de la historia afroamericana en la historia de los Estados Unidos. Esta ley sirve también para renovar el compromiso con la justicia racial, y realza la historia de nuestro país, celebra y protege el progreso logrado, y apunta hacia el trabajo inacabado.

El presidente Biden y la vicepresidenta Harris están invirtiendo en el futuro de las mujeres y las niñas, desde la defensa de la libertad reproductiva, la inversión en investigación sobre la salud de la mujer y la mayor participación de las mujeres en la fuerza laboral, hasta la lucha para poner fin a la violencia contra las mujeres, la promoción de los derechos humanos de las mujeres y las niñas en todo el mundo y el fomento de la participación política y el liderazgo de las mujeres. El presidente Biden creó el primer Consejo de Política de Género de la Casa Blanca para promover los derechos de las mujeres y las niñas en el país y en el extranjero, y publicó la primera Estrategia Nacional sobre Equidad e Igualdad de Género para guiar estos esfuerzos. Ha firmado órdenes ejecutivas para promover los derechos de las mujeres y le ha dado instrucciones a su Administración para defender la libertad reproductiva, eliminar las prácticas salariales discriminatorias en el Gobierno federal, promover la rendición de cuentas por la violencia sexual relacionada con los conflictos, aplicar reformas bipartidistas de la justicia militar y fortalecer el reconocimiento de la historia de las mujeres por parte de nuestra nación.

Gracias al liderazgo de la vicepresidenta, la Administración también ha adoptado medidas para abordar la crisis de salud materna, reducir los costos de la atención médica para las mujeres, cerrar las brechas en la investigación sobre la salud de la mujer y extender la cobertura de cuidado posparto bajo Medicaid de 2 a 12 meses después del embarazo.

Además, la Administración Biden-Harris está luchando para poner fin a la violencia contra las mujeres y las niñas en los Estados Unidos y en todo el mundo, una piedra angular de la carrera del presidente. Como senador de los Estados Unidos, el presidente Biden redactó y defendió la Ley contra la Violencia hacia las Mujeres (VAWA), una ley histórica que ha buscado reautorizar y reforzar desde entonces. En 2022, firmó la Ley de Reautorización de la VAWA de 2022, que garantiza los niveles de financiación más altos de la historia para apoyar la implementación de las nuevas protecciones y programas de la ley. El presidente Biden también firmó la Ley Bipartidista de Comunidades más Seguras, la ley de seguridad de armas más importante en casi tres décadas, para reducir la “laguna legal del novio” y ayudar a mantener las armas fuera del alcance de los abusadores domésticos. La Administración está reforzando la protección de los sobrevivientes de agresiones sexuales y acoso en el lugar de trabajo, y también poniendo fin a la violencia de género dondequiera que ocurra (en el hogar, en el trabajo, en la escuela, en el ejército y en línea) con la guía de la Casa Blanca del primer Plan Nacional de los EE. UU. para Terminar con la Violencia de Género.

El presidente Biden también nombró un número récord de secretarias de gabinete, así como a la primera mujer afroamericana del país en formar parte de la Corte Suprema de los Estados Unidos, la jueza Ketanji Brown Jackson, y a la primera mujer elegida vicepresidenta, Kamala Harris.

Desde el primer día, el presidente Biden ha desempeñado un papel decisivo en la corrección de injusticias históricas y en la promoción de la igualdad para los estadounidenses LGBTQI+. En 2021, el presidente Biden revocó la prohibición impuesta a los miembros transgénero del servicio militar. El presidente defendió y promulgó la Ley de Respeto al Matrimonio que garantiza el reconocimiento legal de los matrimonios homosexuales e interraciales en todos los estados del país. Y también revocó la prohibición discriminatoria de las donaciones de sangre por parte de hombres homosexuales y bisexuales.

El presidente Biden concedió un indulto categórico a algunos antiguos miembros del servicio militar condenados por delitos basados únicamente en su orientación sexual e identidad de género. Como resultado de esta acción, estos antiguos miembros del servicio militar pueden ser elegibles para un indulto y, una vez concedido, solicitar una mejora de su estado de baja militar, lo que podría desbloquear el acceso a beneficios adicionales del VA, tales como atención médica, beneficios por discapacidad, garantía de préstamo para vivienda y prestaciones por sepelio.

El presidente Biden también firmó varias órdenes ejecutivas históricas para prevenir y combatir la discriminación por motivos de identidad de género u orientación sexual y promover la igualdad de las personas LGBTQI+. Estas órdenes ejecutivas formaron la base de decenas de medidas ejecutivas y normas que toda la Administración ha adoptado para promover los derechos civiles y mejorar la vida de los estadounidenses LGBTQI+. Estas normas ofrecen protecciones a la comunidad LGBTQI+ contra la discriminación en una serie de áreas críticas, incluidas varias normas innovadoras que protegen contra la discriminación en la atención médica, protegen a los estudiantes LGBTQI+, protegen a los jóvenes LGBTQI+ en hogares de acogida, y más.

En 2022, la Corte Suprema anuló el caso Roe contra Wade. Como resultado, millones de estadounidenses viven ahora bajo prohibiciones estatales extremas con respecto al aborto que ponen en peligro la salud y la vida de las mujeres, además de amenazar a médicos y enfermeros con penas de cárcel por brindar la atención médica para la que han sido entrenados.

La Administración Biden-Harris ha tomado importantes medidas ejecutivas para proteger el acceso a la atención de salud reproductiva, incluidos el aborto, la anticoncepción y la fertilización in vitro. Estas medidas incluyen ayudar a garantizar que las mujeres reciban la atención que necesitan en caso de emergencia; proteger el acceso al aborto con medicamentos seguros y eficaces aprobados por la FDA; defender el derecho a viajar para recibir atención médica; apoyar el acceso a la atención de salud reproductiva para los miembros de las fuerzas armadas y los veteranos; ampliar el acceso a los anticonceptivos asequibles; y fortalecer la protección de la privacidad de los pacientes y los proveedores de atención médica.

Estos jueces están excepcionalmente bien calificados. Provienen de todas partes de la sociedad y, colectivamente, forman el grupo más diverso de nombramientos judiciales jamás propuesto por un presidente: el 64% son mujeres y el 62% son personas de color. Antes de su nombramiento, trabajaron en todos los campos del derecho, desde abogados laboralistas luchando por los trabajadores hasta abogados de derechos civiles protegiendo el derecho al voto. Y, a pesar de las diferencias en antecedentes y experiencia, todos están comprometidos a los principios que son el núcleo de nuestra democracia: independencia, autonomía personal y libertad.

Los jueces importan. Estos hombres y mujeres tienen el poder de defender derechos básicos o de hacerlos retroceder. Trabajan en casos que deciden si las mujeres tienen libertad para tomar sus propias decisiones de salud reproductiva, si los estadounidenses tienen libertad para votar, si los trabajadores tienen libertad para sindicarse y ganar un salario digno para sus familias y si los niños tienen libertad para respirar aire limpio y beber agua limpia.

El año 2023 tuvo una de las tasas más bajas de crímenes violentos en más de 50 años, y la tasa de homicidios experimentó su mayor descenso en la historia. El presidente Biden hizo inversiones históricas en la aplicación de la ley y en intervenciones contra la violencia comunitaria.

También creó la primera Oficina de Prevención de la Violencia Armada de la Casa Blanca (supervisada por la vicepresidenta Harris) para reducir la violencia armada e implementar y ampliar las medidas ejecutivas y legislativas claves adoptadas para ayudar a salvar vidas.

En 2022, el presidente Biden logró ampliar las verificaciones de antecedentes cuando firmó la Ley Bipartidista de Comunidades más Seguras. Esta ley amplió la categoría de vendedores de armas que deben convertirse en comerciantes autorizados y realizar verificaciones de antecedentes. También contiene la primera ley federal sobre tráfico de armas y compra a través de testaferro que ha permitido al Departamento de Justicia imputar a más de 500 acusados. La Administración ha obtenido más de $350 millones específicamente para la intervención contra la violencia comunitaria y también ha anunciado decenas de medidas ejecutivas para reducir los delitos con armas de fuego, por ejemplo, persiguiendo las armas fantasma y manteniendo las armas ilegales fuera de nuestras ciudades.

Desde su primer día en el cargo, el presidente Biden ha pedido al Congreso que apruebe leyes para asegurar nuestra frontera y arreglar nuestro fallido sistema de inmigración. Después de que los republicanos del Congreso votaran dos veces en contra del conjunto de reformas bipartidistas de la inmigración más estricto y justo en décadas, el presidente Biden anunció una medida ejecutiva que ha reducido los cruces fronterizos ilegales en más del 60%. Hoy hay menos cruces fronterizos que al final de la administración anterior. Además, el presidente Biden ha incrementado el personal y la tecnología de las fuerzas del orden en la frontera sur y ha incautado cantidades récord de fentanilo en nuestros puertos de entrada. Los funcionarios fronterizos detuvieron más fentanilo ilícito en los puertos de entrada en 2022 y 2023 que en los cinco años fiscales anteriores combinados.

El presidente Biden también ha tomado medidas históricas para mejorar nuestro sistema de inmigración y ampliar las vías legales de entrada a los Estados Unidos, incluidas acciones para mantener unidas a las familias estadounidenses. Ha supervisado una expansión histórica de las vías legales, incluido trabajando hacia un nuevo programa de reunificación familiar que permita a los ciudadanos estadounidenses reunirse más rápidamente con sus familiares mientras pasan por el proceso para recibir la residencia permanente.

Desde el primer día de la Administración Biden-Harris, el presidente prometió luchar para garantizar que la educación superior sea una vía hacia la clase media, no una barrera para las oportunidades, porque sabe que la cancelación de la deuda beneficia a los prestatarios y a toda la economía. Desde que asumió el cargo, la Administración Biden-Harris ha aprobado el alivio de la deuda estudiantil de más de 5 millones de estadounidenses, a cada uno de los cuales se le ha aprobado un promedio de aproximadamente $35 000 en condonación de deuda estudiantil.

La Administración Biden-Harris arregló el programa de Condonación de Préstamos de los Servicios Públicos, para que los trabajadores de los servicios públicos, como enfermeros, maestros, bomberos, personal de primeros auxilios y otros, obtengan el alivio al que tienen derecho. Como resultado, casi 950 000 funcionarios públicos han sido aprobados para la Condonación de Préstamos de los Servicios Públicos desde que el presidente Biden asumió el cargo, un aumento sobre el total de 7000 que habían recibido alivio de la deuda a través de este programa antes de esta Administración. La Administración Biden-Harris también ha tomado medidas sin precedentes para mejorar el fallido sistema de préstamos y poner la educación superior más al alcance de millones de personas, por ejemplo, a través de brindar un aumento de $900 a la subvención máxima de la beca Pell (el mayor incremento en más de una década); arreglar el programa de pago basado en los ingresos para que los prestatarios obtengan la ayuda a la que tienen derecho por ley; y responsabilizar a las universidades por aprovecharse de los estudiantes y las familias. En 2024, el presidente Biden expuso los nuevos planes de su Administración que cancelarían la deuda estudiantil de más de 30 millones de estadounidenses si se combinan con todo lo que la Administración ha hecho hasta ahora.

El presidente Biden emitió indultos categóricos por delitos federales de posesión simple de marihuana, lo cual eliminó las barreras a la vivienda, el empleo, las oportunidades educativas y más para miles de estadounidenses. Ha pedido a los gobernadores que sigan su ejemplo y emitan indultos similares para los delitos estatales. Para ayudar a remediar el enfoque fallido de nuestro país hacia la marihuana, incluidas las disparidades raciales, la Administración también puso en marcha el proceso para reclasificar la marihuana bajo la ley federal. La marihuana es actualmente una droga de la Lista I, superior a la clasificación del fentanilo y la metanfetamina, drogas que impulsan la epidemia de sobredosis en nuestro país.

El presidente Biden reforzó Medicare, permitiéndole negociar para bajar los costos de los medicamentos, lo que ahorra a los contribuyentes $160 000 millones, ayuda a ampliar la solvencia de Medicare en una década, y también reduce los costos para los adultos mayores y las personas con discapacidades. El presidente Biden firmó la Ley de Equidad en el Seguro Social, convirtiéndose en el primer presidente en más de veinte años en ampliar los beneficios del seguro social. Este proyecto de ley amplió los beneficios en cientos de dólares por mes para más de 2,5 millones de estadounidenses.

- Desde su primer día en el cargo, el presidente Biden y la vicepresidenta Harris han cumplido con la agenda climática y de conservación más ambiciosa de la historia. Esto incluye la iniciativa presidencial America the Beautiful, que apoya los esfuerzos de conservación locales en todo el país con el objetivo de proteger, conservar y restaurar al menos el 30% de las tierras y aguas de los Estados Unidos para 2030. El presidente Biden lanzó una de los esfuerzos más rápidos para el progreso de la conservación en la historia y conservó 674 millones de acres de tierras y aguas, más que cualquier otro presidente en la historia, y creó el corredor más grande de tierras protegidas en los 48 estados inferiores, el Corredor de Conservación de Moab a Mojave.

Desde que asumió el cargo, la Administración Biden-Harris ha establecido o ampliado doce monumentos nacionales y restaurado la protección de otros tres; ha creado seis nuevos refugios nacionales de vida silvestre y ampliado significativamente otros cinco; ha establecido dos nuevos santuarios marinos nacionales e iniciado el proceso para designar o ampliar la protección de otros cinco; ha creado una nueva reserva nacional de investigación de estuarios; estableció el Monumento Nacional Chuckwalla y el Monumento Nacional Sáttítla Highlands para proteger 848.000 acres de tierras en California. El Monumento Nacional Chuckwalla en el sur de California fue la acción culminante del Presidente Biden para crear el nuevo Corredor de Conservación de Moab a Mojave, el corredor más grande de tierras protegidas en los Estados Unidos continentales, que cubre casi 18 millones de acres que se extienden aproximadamente 600 millas, protegiendo el hábitat de la vida silvestre y una amplia gama de recursos naturales y culturales a lo largo del río Colorado, a través de la meseta de Colorado y en los desiertos de California. Baaj Nwaavjo I'tah Kukveni - Huellas ancestrales del Monumento Nacional del Gran Cañón en Arizona y el Monumento Nacional Avi Kwa Ame en Nevada; ha protegido las aguas fronterizas de Minnesota, el espacio natural más visitado del país; ha salvaguardado de la explotación minera a la bahía de Bristol, en el suroeste de Alaska, y ha protegido el océano Ártico de la explotación de petróleo y gas; y ha retirado el cañón Chaco, en Nuevo México, y la divisoria de Thompson, en Colorado, de nuevos arrendamientos de petróleo y gas, lo que protegerá tierras prístinas y miles de lugares sagrados. La Administración Biden-Harris puso en marcha el primer Plan de Acción Climática para el Océano de los Estados Unidos. La Administración protegió el océano y las costas estadounidenses de la perforación petrolera y de gas natural en alta mar, incluidos más de 625 millones de acres en toda la costa atlántica de EE.UU., el este del Golfo de México frente a la costa de Florida; el Océano Pacífico frente a las costas de Washington, Oregón y California; porciones adicionales del Mar de Bering del Norte en Alaska; y todo el Océano Ártico de EE. UU.

Debido a su creencia de que la conservación ayuda a contar una historia más completa de nuestro país, el presidente Biden promulgó una Orden Ejecutiva sobre el Reconocimiento y Homenaje a la Historia de las Mujeres y preservó lugares significativos para la historia de los derechos civiles, incluidos el monumento nacional del Motín Racial de Springfield de 1908 y el monumento nacional de Emmett Till y Mamie Till-Mobley. La Administración Biden-Harris también ordenó la conservación de los bosques antiguos y maduros; puso la conservación en igualdad de condiciones con el desarrollo en la gestión de nuestras tierras públicas; y protegió el Ártico Occidental para las generaciones futuras. La Administración está predicando con el ejemplo en la escena mundial mediante el lanzamiento del Desafío del Agua Dulce a nivel nacional de America the Beautiful, estableciendo metas ambiciosas para restaurar, reconectar y conservar 8 millones de acres de humedales y 100 000 millas de ríos y arroyos para 2030, y aprovechó la asociación de tribus, estados, ciudades, empresas y organizaciones sin fines de lucro para actuar en apoyo del agua limpia.

El programa Inversión en los Estados Unidos de la Administración Biden-Harris ha desencadenado un auge de la energía solar, la energía eólica, el almacenamiento en baterías y otras tecnologías de energía limpia en los Estados Unidos, y se espera que en 2024 se bata el récord establecido en 2023 de mayor cantidad de energía limpia agregada a la red en un año. Estas inversiones también están reforzando la propia red eléctrica, apoyando líneas de transmisión nuevas y mejoradas para suministrar electricidad más asequible y fiable y evitar cortes en el suministro. La Administración ha realizado la mayor inversión en electrificación rural desde la década de 1930, impulsó la industria eólica marina estadounidense aprobando proyectos suficientes para abastecer a más de 3.5 millones de hogares, superó los objetivos de nuevos proyectos de energía limpia en tierras públicas y ayudó a los hogares con bajos ingresos a beneficiarse del ahorro en energía solar, todo ello mientras hacía más eficiente el proceso de concesión de permisos para que los proyectos puedan construirse y empezar a beneficiar a los estadounidenses, reforzaba la fabricación estadounidense de energía limpia para que estas tecnologías se produzcan de manera local y estimulaba el desarrollo económico en las comunidades energéticas que han alimentado a nuestra nación durante generaciones.

Este auge de la energía limpia forma parte de los esfuerzos históricos de la Administración Biden-Harris para combatir la crisis climática y proporcionar a las comunidades aire limpio, agua limpia y vecindarios saludables. La Administración creó el primer Grupo de Trabajo Nacional sobre el Clima para reunir a agencias federales y tomar cientos de nuevas acciones hacia objetivos audaces, incluida la reducción de la contaminación climática de los Estados Unidos entre un 50% por debajo de los niveles de 2005 en 2030. Estas medidas incluyen poner en marcha el Cuerpo Climático de los Estados Unidos (American Climate Corps) para preparar a decenas de miles de jóvenes para puestos de trabajo bien remunerados en la economía limpia; ahorrar dinero a los estadounidenses en las facturas de servicios públicos mediante viviendas y edificios comerciales más eficientes; reunir a los fabricantes de automóviles y a los trabajadores del sector automotriz para promover las oportunidades de los vehículos eléctricos; ayudar a que la fabricación estadounidense sea la más limpia y competitiva del mundo; establecer normas inteligentes para reducir los supercontaminantes; invertir en los agricultores de la nación para apoyar la agricultura climáticamente inteligente; fortalecer los bosques de los Estados Unidos; y hacer que las comunidades sean más resistentes al clima extremo. La Administración ha dado prioridad a la justicia ambiental en todos estos esfuerzos y ha logrado avances históricos en la sustitución de las tuberías de plomo, la protección de las comunidades frente a la contaminación por PFAS y otras sustancias químicas tóxicas, y la limpieza de los sitios del Superfondo y otras zonas afectadas por la contaminación del pasado.

A través del Plan de Rescate Económico, la Administración Biden-Harris aseguró $130 000 millones para las escuelas de jardín de infantes a 12.º grado de los Estados Unidos, la mayor inversión en este rango educativo en la historia para ayudar a las escuelas a reabrir con seguridad y abordar el impacto del COVID-19 en la salud académica, mental y física de los estudiantes, y otras necesidades. Esta inversión está dando resultados, incluidas notables mejoras en el rendimiento de los estudiantes. La Administración se centra especialmente en las comunidades con altos índices de pobreza, y destina casi $800 millones a escuelas con escasos recursos. Además de esta inversión, la Administración consiguió un aumento anual de $2000 millones en la financiación del Título I para nuestras escuelas más desatendidas. La Administración Biden-Harris también proporcionó un aumento de $1500 millones en la financiación para apoyar la educación especial y los servicios relacionados para 7,5 millones de estudiantes con discapacidades en los Estados Unidos. Por último, la Administración está invirtiendo en nuestros maestros, aumentando las inversiones en $112 millones para preparar, contratar, desarrollar y retener a los maestros, y asegurando $23 millones en la primera financiación del Programa de Centros de Excelencia Augustus F. Hawkins para aumentar el número de maestros de color y educadores multilingües en todo el país. Las inversiones federales han contribuido a crear más de 643 000 puestos de trabajo en educación.

Para ayudar a que nuestras escuelas sean más seguras y satisfacer las necesidades de salud mental y otras necesidades de nuestros estudiantes, la Administración proporcionó $1000 millones a través de la BSCA para profesionales de la salud mental en las escuelas, que preparará a 164 000 profesionales de salud mental adicionales para servir a los Estados Unidos. Y para ayudar aún más a satisfacer las necesidades de los estudiantes, la Administración quintuplicó las inversiones en escuelas comunitarias de servicio completo, incluido el aporte de $253 millones para crear más de 2000 nuevas escuelas comunitarias de servicio completo que proporcionan apoyo crítico a más de 1 millón de estudiantes para satisfacer sus necesidades físicas, de salud mental y académicas.

Es importante destacar que la Administración ha invertido miles de millones de dólares en colegios y universidades históricamente negros (HBCUs por sus siglas en inglés), colegios y universidades tribales e instituciones al servicio de las minorías, como hispanos, asiático-americanos y los nativos americanos de las islas del Pacífico, incluido un récord de más de $19 000 millones para los colegios históricamente negros y un récord de $16 000 millones para las instituciones al servicio de los hispanos. La Administración también destinó más de $5000 millones a colegios universitarios, universidades, organizaciones sin fines de lucro y organizaciones comunitarias estadounidenses para aumentar el acceso a la universidad y el éxito de los estudiantes de bajos ingresos, los estudiantes de primera generación y los estudiantes con discapacidades.

Por último, el presidente Biden y la vicepresidenta Harris han ampliado las vías a empleos bien remunerados, en particular los que no requieren una titulación de cuatro años, aumentando las oportunidades de aprendizajes matriculados y los programas en colegios comunitarios y técnicos que conectan sectores en crecimiento como las energías limpias, la fabricación y la infraestructura.

• Logros para los afroamericanos

  El presidente Biden y la vicepresidenta Harris han logrado resultados para las comunidades negras, incluida la reducción de la pobreza infantil casi a la mitad en 2021 y la salida de la pobreza de 4400 000 niños negros; la lucha contra la crisis de salud materna negra mediante la ampliación de la atención posparto de Medicaid; el aumento de la inscripción de negros en la cobertura de la Ley de Atención Médica Asequible en un 95%, o más de 1,7 millones de personas desde 2020; la promulgación de una orden ejecutiva que estableció la Iniciativa de la Casa Blanca para Promover la Equidad, la Excelencia y las Oportunidades Económicas Educativas para los Afroamericanos; la inversión de más de $19 000 millones en HBCUs; y la creación de 2,4 millones de puestos de trabajo para trabajadores negros, alcanzando la tasa de desempleo de la población negra más baja registrada desde hace más de 50 años. Bajo la Administración Biden-Harris, los afroamericanos están creando nuevas empresas al ritmo más rápido de las últimas tres décadas, son propietarios de más viviendas y disfrutan de valores más altos de tasación de viviendas, y tienen más oportunidades educativas a un ritmo récord: todo ello contribuye a un aumento del 60% en la riqueza de la gente de la comunidad negra en comparación con lo que ocurría antes de la pandemia.

  La Administración Biden-Harris cumplió su compromiso del primer día de proteger los derechos civiles y luchar contra la injusticia sistémica. En julio de 2024, el presidente Biden entregó más de $2000 millones en ayuda financiera a más de 43 000 agricultores, ganaderos y propietarios forestales, incluidos muchos individuos de raza negra, que anteriormente habían sufrido discriminación al solicitar programas de préstamos agrícolas del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA). La Administración Biden-Harris también ha tomado medidas históricas para apoyar a las pequeñas empresas y emprendimientos dentro de las comunidades negras, incluido el gasto de más de $10 000 millones en contratos federales con pequeñas empresas de propiedad de personas de raza negra en el año fiscal 2023, y la ampliación del acceso al capital que apoya la creación y expansión de negocios, triplicando los préstamos respaldados por la Administración de Pequeñas Empresas a empresas de propiedad de personas negras en comparación con el año fiscal 2020.

• Logros para los latinos

  Bajo la Administración Biden-Harris, más comunidades latinas que nunca están cumpliendo el sueño americano. El presidente Biden y la vicepresidenta Harris han creado 5 millones de empleos para trabajadores latinos: se están creando empresas propiedad de latinos al ritmo más rápido en más de una década. En el año fiscal 2023, las pequeñas empresas propiedad de latinos recibieron más de $10 000 millones en dólares de contratación federal, y los préstamos respaldados por la Administración de Pequeñas Empresas a empresarios latinos se han duplicado desde el año fiscal 2020. La Administración Biden-Harris ha trabajado para promover la equidad educativa de los estudiantes latinos, incluida la firma de una orden ejecutiva que establece la Iniciativa de la Casa Blanca para Promover la Equidad, la Excelencia y las Oportunidades Económicas Educativas a través de Instituciones al Servicio de los Hispanos (HSI) y la inversión récord de más de $16 000 millones en colegios y universidades al servicio de los hispanos. Este año, la Administración también propuso una norma para ampliar la elegibilidad para los programas de acceso a la universidad de TRIO a Dreamers y otros, permitiendo que aproximadamente 50 000 estudiantes más de bajos ingresos accedan a los programas y servicios de TRIO, y que miles más asistan a la universidad.

  La Administración ha hecho que la atención médica sea más accesible, incluso a través del lanzamiento de un programa de subvenciones para capacitar a los proveedores médicos en la atención culturalmente competente para las personas con dominio limitado del inglés; lanzó la Línea Nacional de Salud Mental Materna en inglés y español; añadió servicios de texto y chat en español a la Línea Nacional 988 de Prevención del Suicidio y Crisis; y está luchando para ampliar la elegibilidad para la cobertura de la Ley de Atención Médica Asequible a los beneficiarios de la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), lo que ayudaría a más de 100 000 jóvenes a obtener un seguro médico. El presidente Biden y la vicepresidenta Harris se han comprometido a apoyar a los estadounidenses latinos, tanto en el continente como en Puerto Rico. La Administración puso en marcha el Diálogo Económico de Puerto Rico y entregó más de $140 000 millones en recursos federales que han impulsado el cambio económico de la isla. Bajo la Administración Biden-Harris, Puerto Rico ha añadido más de 100 000 nuevos puestos de trabajo, y la tasa de desempleo se encuentra ahora en un mínimo histórico de 6%, en comparación con el promedio a largo plazo de más de 14%.

• Logros para los asiático-estadounidenses, nativos de Hawái e isleños del Pacífico

  La Administración Biden-Harris realizó inversiones históricas en el crecimiento de las pequeñas empresas de asiático-estadounidenses (AA), nativos de Hawái (NH) e isleños del Pacífico (PI). En el año fiscal 2023, las adjudicaciones de contratos federales a pequeñas empresas propiedad de asiático-estadounidenses ascendieron a más de $20 000 millones, un aumento de $2700 millones con respecto al año anterior. La Administración de Pequeñas Empresas también respaldó 7500 préstamos a empresas propiedad de AA y PI por un total de más de $6400 millones. La Administración Biden-Harris ha trabajado para asegurar la promesa de los Estados Unidos para las comunidades de asiático-estadounidense e isleños del Pacífico (NHPI), incluso a través de la promulgación de una orden ejecutiva por la que se establece la Iniciativa de la Casa Blanca sobre Estadounidenses de Origen Asiático, Nativos de Hawái e Isleños del Pacífico y la entrega de $5000 millones en fondos del Plan de Rescate Económico a colegios y universidades que atienden a AA y NHPI.

  A raíz del aumento de los incidentes motivados por el odio contra las comunidades AA y NHPI en 2021, el presidente Biden promulgó la Ley de Delitos de Odio por COVID-19 y desplegó recursos federales para mejorar la denuncia de los delitos motivados por el odio. Para mejorar la capacidad del Gobierno Federal para servir a todas las comunidades, la Administración revisó las normas de datos federales sobre raza y etnia por primera vez en 27 años, incluidas las actualizaciones que ayudarán a garantizar que las personas AA y NHPI puedan identificarse más plenamente por etnia específica. La Administración también ha reforzado el acceso lingüístico, reduciendo las barreras a los servicios federales para las personas con un dominio limitado del inglés y ampliando la disponibilidad de varias lenguas asiáticas en los programas gubernamentales. El presidente Biden y la vicepresidenta Harris se han comprometido a preservar el patrimonio indígena y las tierras de los nativos de Hawái y los isleños del Pacífico, y han invertido $11 millones en programas educativos para la revitalización de las lenguas nativas y la preservación de los conocimientos indígenas; han ampliado las opciones de vivienda asequible para los nativos de Hawái, lo que permitirá a más familias residir en tierras natales hawaianas; y han movilizado toda la fuerza del Gobierno federal y más de $1700 millones en fondos de ayuda de emergencia para apoyar a las comunidades que se recuperan de los desastrosos incendios forestales de Maui.

• Logros para las comunidades indígenas

  La Administración Biden-Harris ha realizado inversiones históricas en las Naciones Tribales y comunidades indígenas a través del Plan de Rescate Económico ($32 000 millones), la Ley Bipartidista de Infraestructura ($13 000 millones) y la Ley de Reducción de la Inflación ($700 millones). El presidente Biden también promulgó la Orden Ejecutiva 14112, que establece que es política de los Estados Unidos diseñar y administrar los programas federales de financiación y apoyo a las Naciones Tribales de forma que se reconozcan y apoyen mejor la soberanía y autodeterminación tribales. Por primera vez en la historia, la Administración Biden-Harris aseguró con éxito asignaciones anticipadas para el Servicio de Salud Indígena (IHS) y el presidente ha solicitado fondos obligatorios para el IHS en el futuro. El presidente Biden ha movilizado a todo el gobierno para que apoye la responsabilidad del fideicomiso federal y los derechos de los tratados tribales mediante la reconstitución del Consejo de la Casa Blanca sobre Asuntos de los Nativos Americanos y la Cumbre de las Naciones Tribales de la Casa Blanca. Además, el presidente ha cumplido con su compromiso de tener una Administración que se parezca a los Estados Unidos, nombrando a la primera secretaria de gabinete nativa americana con la secretaria del Departamento del Interior Deb Haaland, además de más de 80 nativos americanos en cargos administrativos de alto nivel en toda la Administración. El presidente también ha reforzado la Consulta Tribal firmando dos memorandos presidenciales que ordenan a las agencias federales que presenten planes de acción para implementar consultas significativas con las Naciones Tribales y establecer estándares uniformes para la Consulta Tribal. Además, la Administración Biden-Harris subrayó el respeto de la Administración por el conocimiento indígena (IK) al emitir un memorando presidencial que ordena a las agencias respetar e incorporar el IK en las políticas científicas federales y al celebrar una cantidad sin precedentes de acuerdos de coadministración entre tribus, grupos nativos y departamentos federales para la gestión de tierras federales.

El presidente emitió una orden ejecutiva que ordenó el conjunto de acciones ejecutivas más completo jamás adoptado para promover la investigación sobre la salud de la mujer, lo que garantiza que la salud de las mujeres se integre y priorice en toda la cartera y el presupuesto federales de investigación e impulsando nuevas investigaciones sobre una amplia gama de temas, incluida la salud de la mujer en la mediana edad. Los organismos miembros de la Iniciativa de la Casa Blanca para la Investigación sobre la Salud de la Mujer se han comprometido colectivamente a llevar a cabo más de 100 acciones a corto y largo plazo que harán avanzar la investigación sobre la salud de la mujer. Esto incluye el lanzamiento de un nuevo esfuerzo en la totalidad de los Institutos Nacionales de la Salud (NIH) que dirigirá inversiones clave de $200 millones en el año fiscal 2025 para financiar nuevas investigaciones interdisciplinarias sobre la salud de la mujer y el Sprint para la Salud de la Mujer dirigido por la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzados, que comprometió $100 millones para la investigación y el desarrollo transformadores en la salud de la mujer.

Durante el discurso del presidente sobre el Estado de la Unión, el presidente pidió al Congreso una inversión audaz y transformadora de $12 000 millones para la investigación de la salud de la mujer. Esta inversión se utilizaría para crear un Fondo para la Investigación sobre la Salud de la Mujer en los NIH con el fin de impulsar una agenda de investigación interdisciplinar de vanguardia y establecer una nueva red nacional de centros de investigación de excelencia e innovación sobre la salud de la mujer, que serviría de referencia nacional para la investigación sobre la salud de la mujer a lo largo de toda la vida.

El presidente y la vicepresidenta han invertido más de $700 millones en programas de aprendizaje matriculado, lo que ha dado lugar a más de un millón de aprendices desde que asumieron el cargo. La Administración Biden-Harris también ha invertido cientos de millones de dólares en programas de colegios comunitarios y técnicos, mediante, entre otros, los fondos del Plan de Rescate Económico y el programa de Fortalecimiento de los Colegios Comunitarios. La primera dama Jill Biden ha defendido el aprendizaje relacionado con la carrera, viajando por el país para resaltar modelos innovadores y lanzar el primer programa de becas para escuelas secundarias relacionadas con la carrera a fin de apoyar formas prometedoras y basadas en evidencia de conectar las escuelas secundarias con los colegios universitarios y las carreras. También puso en marcha la iniciativa Centros de Fuerza Laboral de la Casa Blanca, un esfuerzo para crear asociaciones locales entre ciudades, estados, empleadores, sindicatos, escuelas secundarias y colegios universitarios comunitarios en zonas del país que han recibido importantes inversiones federales y privadas. En la actualidad hay nueve Centros de Fuerza Laboral.